Celebración total en Arica. San Marcos se proclamó campeón del torneo de Apertura, tras igualar sin goles frente a Deportes Concepción. Esto, sumado a la caída de Barnechea como local ante Ñublense, le permitió posicionarse como el mejor equipo del primer semestre y asegurar su presencia en la Final de Campeones, que se jugará al término de la temporada 2012.
En términos generales, el duelo frente a los lilas fue pálido. Sin mayores emociones, ambos equipos carecieron de profundidad y se acercaron en escasas ocasiones a las porterías correctamente defendidas por Carlos Kletnicki y Pedro Carrizo.
La primera opción de riesgo llegó a los 5'. Javier Bustos se despachó un zurdazo que remeció el vertical, cuando Carrizo ya estaba vencido. En el arranque jugaba mejor el local y el remate del volante, se pensó sería un aviso.
Sin embargo, con el correr de los minutos San Marcos se sintió más cómodo en el pesado terreno del Ester Roa Rebolledo y a los 24, Joel Estay falló en inmejorable posición, prácticamente en área chica, frente a la portería del trasandino Kletnicki.
No hubo mucho más en la primera etapa. En el complemento y sabiendo que Ñublense derrotaba a Barnechea, el Santo siguió interpretando a la perfección el libreto, sin dejar espacios a la ofensiva del cuadro de Germán Corengia.
En la contra en tanto, Pablo Francés estuvo cerca con un cabezazo que el golero de Concepción envió al córner y después el talentoso Renato González exigió otra vez al guardavallas del León de Collao, con un centro que casi se cuela en la portería.
Con el pitazo final, llegaría la alegría del plantel ariqueño, que prefirió esperar el término del duelo del "Barne" frente a los Diablos Rojos para festejar, aseguró al menos la promoción y el segundo semestre pretende ir por el título en la tabla general, de modo de alcanzar el retorno directo a Primera División.
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