Por Luis Montenegro /@LuisMontenegro7
32 años han pasado desde aquella vez en que San Luis, en su casa y luego
de empatar 2 a 2 con Regional Atacama, gritara campeón, con un equipo del cual
cualquier hincha que sabe de fútbol recuerda. Y es que a cualquier fanático del
fútbol al cual se le pregunta por San Luis de Quillota inmediatamente nombra a
Pato Yañez, Pititore Cabrera, Pindinga Muñoz o Freddy Bahamondes.
Aquél año este joven y aguerrido equipo, entre los cuales se contaban
otros baluartes como Carlos "Chandoka" Sandoval, Álex
"Patato" Martínez, Uruguay Graffigna, Moisés Berenguela, Sergio
"Zorro" Salinas o Mario Figueroa trascendió fronteras. Pese a jugar en
segunda división, ofrecía espectáculo a través de todo Chile, transformándose
incluso en el primer equipo de la división de ascenso que transfirió a uno de
sus jugadores a Europa y lo catapultó a la selección chilena. Si, hablamos del
Pato Yañez, el "chico bonito" cuya velocidad lo llevó a Tenerife y a
convertir, entre otros, el mítico gol que llevó a Chile al mundial de España.
32 años tuvieron que pasar para que este grupo de jugadores que hicieron
de sus hazañas leyenda se volvieran a reunir. Y fue gracias a un puñado de
hinchas, los cuales a través del sitio KnariosTV.com tuvieron la genial idea de
homenajear de manera diferente a sus ídolos de antaño, volviendo a reunirlos y
hacerlos vestir de corto. Esta iniciativa, llamada "sueño canario" reunió
además a otro de los equipos que hizo historia en Quillota, al sacar a San Luis
campeón de tercera división un 14 de Diciembre de 2003, en la lejana ciudad de
Los Ángeles. Aquel equipo, comandado por Humberto Suazo, logró terminar con 13
años de martirio en el fútbol amateur.
Y pese a que la gente no respondió como lo esperaban sus organizadores,
la magia, la nostalgia, el reencuentro y las historias se reunieron en el
municipal en una jornada que la gente seguramente no olvidará. En el preliminar
se enfrentaron los elencos de San Luis 2003 y un combinado de estrellas
canarias de todos los tiempos. El equipo de 2003 - que vistió una réplica de la
camiseta que los catapultó a la gloria - fue dirigido por su DT de la época,
Mauricio Riffo. Osvaldo Cataldo, Felipe Salinas, Héctor Nuñez, David Navia,
Eduardo Sepúlveda, Sergio Moreno, Patricio Pérez, Álvaro Villalón, Luis Eduardo
Reinoso y Jonathan Varas fueron acompañados por Aarón Muñoz (que se integró a
San Luis el 2004).
Al frente, el cuadro de las estrellas fue comandado por Hugo
Gómez, arquero muy recordado en Quillota quien emocionado aceptó la invitación
y contó con nombres como Luis Pizarro, Kendru Fernández, Fidel Córdoba (campeón
con San Luis el 2009), Francisco "Care Cueca" Rodríguez, Andrés
Jorquera, Jorge "Mágico" Perez, Rafael Celedón, Franz
"Otto" Arancibia, Axel Ahumada y el joven tri goleador del fútbol
ANFA de Quillota, Sebastián Alcalde. Este partido terminó 1 a 0 a favor de las
estrellas, con solitaria anotación de Axel Ahumada.
Y para el plato de fondo, los astros del 80' volvieron a pisar los
pastos del municipal Quillotano, vestidos rigurosamente de corto y con unas
camisetas similares a las míticas centauro con las que se hicieron conocidos.
Con varias canas y kilos más sobre sus zapatos pero no con menos magia que hace
30 años atrás, los canarios saltaron a la cancha con una formación muy similar
a la que usaban en esos años, lamentando solamente las ausencias de Patricio
Yañez - convaleciente de su accidente vascular - ,Jorge "Pindinga" Muñoz
y Sergio Abayay, ambos en estados Unidos. Así, los canarios formaron con Carlos
"Chandoka" Sandoval al arco, Jaime "Pollo" Muñoz, Moisés
Berenguela, Mario Figueroa y Juan Carlos Muñoz en defensa; René Gatica, Freddy
"Guatón" Bahamondes y Uruguay Graffigna en el mediocampo para dejar a
Álex "Patato" Martínez, Victor "Pititore" Cabrera y Sergio
"Zorro" Salinas en ataque. En el entretiempo entró Álvaro Graffigna
(hijo de Uruguay), José "Manopla" Zamora, Mauricio Riffo y César
Lasnibat.
El cuadro amarillo tenía al frente a un combinado marista (San Luis
nació en las aulas del Instituto Rafael Ariztía) y ellos no quisieron ser
comparsa, incluso abriendo la cuenta con un rápido contragolpe. Pero la fiesta
era y tenía que ser amarilla, y los canarios igualaron las acciones tras una
falta penal cometida a Victor Cabrera. Pititore causó las risas de todo el
estadio al tropezar con la cancha, pero volvió a tomar vuelo y definió con
elegancia a un costado del arquero rival. Y cuando ya se preveía un empate, una
falta en la medialuna del área grande terminó con un soberbio golazo de Freddy
Bahamondes. El "Guatón", con un evidente sobrepeso, tomó tres pasos
de vuelo y la clavó como con la mano. Los defensas de la barrera no tuvieron
otra que girar la cabeza para ver la obra maestra del volante canario, quien
entregó el broche de oro para una jornada que quedará grabada en la retina de
todos los asistentes a esta jornada.
La entrega simbólica de la copa de campeones de 1980 y las lágrimas
asomándose por la cara de aquellos jugadores que parecían olvidados fueron el
corolario de una hermosa jornada. “Estos niños saben lo que tienen que hacer y
fue un gran honor y gusto dirigirlos otra vez. Don Eduardo “Punto” Silva nos
debe haber acompañado desde arriba y fue un bonito partido”, expresó Carlos
“Máquina” Hernández, preparador físico y DT del equipo, mientras que Franz
Arancibia declaró que “Creo que iniciativas como esta son tremendas y lo que
viví hoy no tiene otra descripción. Feliz de estar en Quillota otra vez y feliz
de compartir con toda la gente”.
lo mas grande el frechi como se le conose en su cuna el gran deportes maipo ..
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